Para que una persona ejerza de forma correcta esta profesión debe estar colegiado, no solamente por la preparación previa, sino por la continua formación y por los servicios completos que ofrecen

 El presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Huelva (COAF), David Toscano, y el vicepresidente del mismo, José Antonio Oria, fueron entrevistados en el programa ‘Contraportada’ de Canalcosta para dar a conocer entre los habitantes de la costa onubense la necesidad de contar con un colegiado, debido a la particularidad de las propiedades de esta zona al ser residencias de veraneo.

David Toscano explicó que “en el momento tan complejo en el que vivimos, donde la alteración de la pacífica convivencia se altera de una manera constante, contar con profesionales cualificados, como los administradores de fincas colegiados, es importantísimo, indispensable”. La importancia de los administradores de fincas colegiados reside “no solamente por la formación y las coberturas”, sino porque son “auténticos árbitros especialistas en la mediación” entre comuneros y propietarios, añadió el presidente.

El presidente del COAF de Huelva resaltó que los colegiados pueden enfrentarse a problemas de todo tipo, “aunque en su mayoría están enfocados a las condiciones de habitabilidad y a la convivencia, como el uso que hacen determinados propietarios de las zonas comunes”. Esto se debe a que una comunidad es un “ente heterogéneo, por lo que algunas personas no se acostumbran o adaptan a vivir en propiedad horizontal”, una forma de vida “compleja, ya que todo el mundo participa dentro de unos elementos comunes y unos límites” añadió.

Aunque es cierto que el papel de los colegiados es el de ejercer de intermediario, la mediación “llega hasta donde quieran los comuneros y los propietarios”, aseguró Toscano, a lo que añadió que pueden asesorar sobre “muchas materias: jurídicas, contable, de estructura, relaciones con la administración pública, etc.”

Otra de las labores de los colegiados es la de informar a sus clientes de las subvenciones, que son “pocas” según David Toscano, de aquellas comunidades de propietarios que puede llegar a acogerse a las mismas. “Nosotros somos el único canal de comunicación y de gestión de las subvenciones públicas”, añadió el presidente y así se lo han trasladado a las diferentes administraciones. De hecho, los administradores de fincas colegiados son los que tienen formación sobre “cualquier tipo de subvención: rehabilitación de la vivienda, ahorro energético, barreras arquitectónicas…”.

A pesar de los problemas que afrontan los colegiados en su día a día, el presidente del COAF destacó que esta profesión “engancha, es una forma de vida que tiene la peculiaridad de la conexión entre las personas y por eso animamos a que se colegien”.

La problemática de las ocupaciones ilegales

En cuanto a las ocupaciones, como en el caso de la urbanización Las Colinas, cuya situación está de actualidad de la mano del COAF llegando incluso al Congreso de los Diputados en el debate de la modificación de la Ley de Enjuiciamiento Civil, “poco se puede hacer”, según el vicepresidente del Colegio, José Antonio Oria.

“Nuestro papel se basa en dar parte a la entidad bancaria propietaria de este bien”, aunque añadió que, en este caso, los vecinos “han pelado mucho y han conseguido agilizar la situación” ya que, normalmente, es “muy complicado conseguir que se involucren porque les puede afectar y, si no les ocasiona molestias, se intentan mantener al margen”.
Finca ocupada en Las Colinas (Isla Cristina)

Finca ocupada en Las Colinas (Isla Cristina)

En relación a esta problemática, el presidente David Toscano aseveró que la ocupación ilegal es un “problema de todos”. Esta “forma de vida que se ha instalado” en las comunidades de propietarios en régimen de propiedad horizontal viene, “principalmente, por la situación económica” aseguró.

Como explicó Toscano, las ocupaciones “afectan a la convivencia, al orden público y perjuicios en los espacios comunes o servicios básicos”. Además, alabó la iniciativa que ha encabezado el Consejo General de los Colegios de Administradores de Fincas para que se cambie la legislación para que se “regule y se trate de manera especial”.

 La particularidad de las propiedades de las zonas de costa onubenses

En Huelva capital las comunidades tienen una “estructura muy específica, donde la única figura que los representa es el presidente· de la comunidad, por lo que es con el que “más contacto se tiene”, aseguró el presidente del COAF, David Toscano.

Pero, como explicó Toscano, “conforme te acercas a los núcleos más vacacionales” existen unos “órganos o juntas de gobierno formada por varias personas”, con las que se mantienen reuniones periódicas mediante las asambleas generales.

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Aunque para el vicepresidente, José Antonio Oria, “muchas veces es más complicado trabajar en esta zona porque casi nunca nadie quiere ser presidente”, por lo que se hace mediante sorteo. “Al final es necesario tener contacto con toda la comunidad “, manifestó Oria.

Con la temporada estival y la población que pasa sus vacaciones en la costa onubense, se podría pensar que los colegiados solo tienen carga de trabajo durante esos meses del año. Pero lo cierto es que “el trabajo no es solamente ahora, sino que tiene que ser previo”. “Hay que tener preparado todas las piscinas, los servicios contratados o la limpieza de urbanizaciones. Aunque es cierto que ahora es cuando hay que estar al pie del cañón”, comentó el vicepresidente del Colegio.

 Servicios especiales para comunidades en apuros

El vicepresidente del COAF, José Antonio Oria, explicó en qué consiste su labor: “Primero hacemos una visita a las comunidades, vemos los servicios que tiene, y, en función a eso y a los problemas que pudiera tener, valoramos nuestro trabajo y ofrecemos un presupuesto”.

De hecho, en la página web del Colegio se encuentra un listado de colegiados y, “aquella finca que quiera un administrador colegiado, se puede poner en contacto con ellos y acceder a los servicios”, informó el presidente del COAF. También quiso insistir sobre la importancia de que “todo aquel que quiera ejercer esta profesión debe colegiarse, ya que es necesario formarse y es una forma de integrarse al mundo laboral”.

Además, José Antonio Oria destacó que, desde el COAF, tienen conocimiento de que existen “numerosas comunidades de propietarios que no pueden permitirse el contratar la labor de un administrador de fincas colegiado”, por lo que desde el COAF “se ha impulsado el proyecto para ayudar a estas comunidades a través del ayuntamiento”. En resumen, es un servicio de asesoramiento gratuito de turno de oficio de comunidades de propietarios con problemas legales o de morosidad.

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Una labor profesional poco reconocida

“Evidentemente, no nos sentimos bien reconocido” manifestó el presidente David Toscano, a lo que añadió que es una “profesión que tiene una función social importantísima, no solamente por la cualificación propia intrínseca de la actividad profesional”.

“Esta profesión es nueva en nuestra provincia”, de hecho, fue la última andaluza en constituirse como colegio. Esto trae consigo que los propietarios la “desconocen, aunque se está haciendo una labor de captación, de impulso de la profesión y de publicidad desde el Colegio para que llegue a todos los ciudadanos”

Los comuneros se dan cuenta que, por un módico precio, obtienen unos servicios que son importantísimos. La formación que debemos tener los administradores colegiados es continua y reglada ya que, de cada 10 decretos ley, la mitad afectan a la propiedad horizontal.

En números, el papel de los administradores de fincas colegiado de Huelva se traduce en que, aproximadamente, existen “unos 3000 administradores de fincas colegiados. Sevilla cuenta con 400 y, en Huelva sin embargo tan solo se alcanzan los 60 con la gran cantidad de propiedades y de viviendas que hay”, contrapuso el presidente del COAF.